TERREVIENTO: 7
ZEN: 4
Los Zen llegaban de ganarle a La Mente, y Terreviento en tanda de penales a Masacre (donde se lesionó su arquero titular, Mr. Pitufo).
El resultado de este encuentro fue sorpresa para muchos, ya que Zen llegaba como claro favorito. Más sorprendente fue el desempeño del primer tiempo, que culminó en contundente 5 a 0 a favor de Terreviento.
El primer gol de Terreviento, fue una jugada de pases en primera: Cachete a Chuki, Chuki a Rubens, y éste que fusiló a Manolo Arévalo, arquero de Zen.
El segundo, nuevamente una sucesión de pases entre Giancarlo, El Chuki, Sabana que se la da a Cachete, y éste que patea un tremendo cañonaso desde casi media cancha que colgó a Manolo. Luego Rubens, Manager de Terreviento, amarra bola como siempre, pero esta vez consigue recuperarse y desmarcarse de uno de los Marambio, para mandar un disparo rasante que Manolo no puede atrapar: Iba 3 a 0.
Los Zen no salían de su asombro, sobre todo porque estos 3 goles se los habían metido en tan solo 7 minutos del primer tiempo.
El cuarto gol de Terreviento llega de un lateral sacado por Sabana. Absolutamente todo Zen se queda parado ( la típica jugada de selección peruana donde la defensa parece de cemento) y Giancarlo le gana la espalda a la defensa, para recibir el pase y simplemente colocarla. Y para completar la quinta perla, Sabana que ve a Giancarlo sólo junto al arquero de Zen, y le envía un pase de área a áera. Giancarlo simplemente se agachó, confundió a Manolo y el balón se fue para adentro. Con el 5 a cero, se fueron al descanso.
En el entretiempo, los Zen se reprochaban mutuamente el bajo desempeño. El más asado era Jhovan.
Tras un análisis meticuloso, podemos afirmar que los Zen fueron anulados durante todo el primer tiempo gracias a una marca férrea de Sabana y Cachete (con pellizcada de fundillo incluída) que se reforzaba por una marca en postas al mejor estilo de los "jotitas". Cuando un Terreviento marcaba, otro cubría su espacio. Inclusive se daban situaciones en donde dos Terreviento marcaban a un solo Zen (generalmente terminaba en un pan con pescao, en donde el pescao era alguno de los Marambio). Pero esa marca, que demanda físico, duró inquebrantable sólo durante el primer tiempo. Porque en la segunda mitad, las cosas cambiaron.
El segundo tiempo arrancó con un Zen más agresivo, y un Terreviento aguantando el partido. Apenas en el minuto 3 de la segunda mitad, Julio de Zen mandó un buen disparo que colgó a Precoz, arquero suplente de Terreviento. Era el 5 a 1.
Tras el gol, en una jugada intrascendente, se lesionó Precoz, quien tuvo un desgarro en la rodilla y tuvo que ser reemplazado por Giancarlo en el arco.
Inmediatamente despúes que se reaunudó el juego, un rollizo Ñete metió un gol, producto de una buena jugada del Chuki. En este momento el partido estaba totalmente abierto, y las marcas sueltas. Iba 6 a 1.
“Vamos gemelo, no todo es tu hermano” se quejaba frustrado uno de los Zen ante la insistencia de los Marambio de jugar de memoria y sólo entre ellos.
“Vamos papá”, desde la tribuna animaba el hijo de Ñete.
En el minuto 12, Chuki recuperó un balón en el área de Zen, se la dio a Rubens y este se la pasó a Ñete, quien en cámara lenta (super slow motion by arriflex) sólo tuvo que empujarla. Iba 7 a 1 a favor de Terreviento.
Después de ese gol, el físico de Terreviento se derrumbó y Zen salió con todo, en busca de remontar el marcador. La presión de la marca de Zen dio resultado cuando Sabana perdió un balón en su área y Alec Marambio se la pasó a Julio, quien nuevamente anotó. Era el 7 a 2.
El 7 a 3 fue un golazo de Jhovan, quien inició la jugada desde su área, llevando el balón por toda la cancha, se la dio a Julio, éste se la devolvió, Jhovan la enganchó y mandó un cañonazo al ángulo, un disparo inatajable. Un golazo de Cubillas.
El 7 a 4 vino de un centro, y fue gol de Ñete... en su propio arco: al tratar de rechazar un saque de "cornel" terminó atropellando a su propio arquero, y la pelota le rebotó en la nuca....y pa dentro el autogol.
Después de esto, llegó la clásica “reventada de pelota a acualquier parte para hacer tiempo”. Y con esta estrategia típica del “fulvo" peruano, Terreviento quemó valiosos minutos. Y los Zen no pudieron hacer mucho contra esto. "Árbitro tiempooooo", se quejaba la barra de Zen.
Y los minutos pasaban, y Zen que no podía llegar más. Porque todo Terreviento se metió en su área, como aquella selección de Bolivia del 86, defendiendo como Paraguay del 94, y sudándola como.... Terreviento del Interbandas.
Llegó el pitazo final, y Terreviento reventó de júbilo, pero simbólicamente. Porque los pobres diablos apenas tenían aire en los pulmones para dar el grito vencedor de "CAMPEONES... CARAJO"!!!
Se jugó fuerte, sí, pero con lealtad. "La pelota nunca se mancha", como dijo aquel gran pichanguero argentino, y futbolista.
Así, damas y caballeros, concluyó el 1er Campeonato Interbandas "Rock n Gol 2008", con Terreviento como el I Campeón del Interbanads.
Salud!
El resultado de este encuentro fue sorpresa para muchos, ya que Zen llegaba como claro favorito. Más sorprendente fue el desempeño del primer tiempo, que culminó en contundente 5 a 0 a favor de Terreviento.
El primer gol de Terreviento, fue una jugada de pases en primera: Cachete a Chuki, Chuki a Rubens, y éste que fusiló a Manolo Arévalo, arquero de Zen.
El segundo, nuevamente una sucesión de pases entre Giancarlo, El Chuki, Sabana que se la da a Cachete, y éste que patea un tremendo cañonaso desde casi media cancha que colgó a Manolo. Luego Rubens, Manager de Terreviento, amarra bola como siempre, pero esta vez consigue recuperarse y desmarcarse de uno de los Marambio, para mandar un disparo rasante que Manolo no puede atrapar: Iba 3 a 0.
Los Zen no salían de su asombro, sobre todo porque estos 3 goles se los habían metido en tan solo 7 minutos del primer tiempo.
El cuarto gol de Terreviento llega de un lateral sacado por Sabana. Absolutamente todo Zen se queda parado ( la típica jugada de selección peruana donde la defensa parece de cemento) y Giancarlo le gana la espalda a la defensa, para recibir el pase y simplemente colocarla. Y para completar la quinta perla, Sabana que ve a Giancarlo sólo junto al arquero de Zen, y le envía un pase de área a áera. Giancarlo simplemente se agachó, confundió a Manolo y el balón se fue para adentro. Con el 5 a cero, se fueron al descanso.
En el entretiempo, los Zen se reprochaban mutuamente el bajo desempeño. El más asado era Jhovan.
Tras un análisis meticuloso, podemos afirmar que los Zen fueron anulados durante todo el primer tiempo gracias a una marca férrea de Sabana y Cachete (con pellizcada de fundillo incluída) que se reforzaba por una marca en postas al mejor estilo de los "jotitas". Cuando un Terreviento marcaba, otro cubría su espacio. Inclusive se daban situaciones en donde dos Terreviento marcaban a un solo Zen (generalmente terminaba en un pan con pescao, en donde el pescao era alguno de los Marambio). Pero esa marca, que demanda físico, duró inquebrantable sólo durante el primer tiempo. Porque en la segunda mitad, las cosas cambiaron.
El segundo tiempo arrancó con un Zen más agresivo, y un Terreviento aguantando el partido. Apenas en el minuto 3 de la segunda mitad, Julio de Zen mandó un buen disparo que colgó a Precoz, arquero suplente de Terreviento. Era el 5 a 1.
Tras el gol, en una jugada intrascendente, se lesionó Precoz, quien tuvo un desgarro en la rodilla y tuvo que ser reemplazado por Giancarlo en el arco.
Inmediatamente despúes que se reaunudó el juego, un rollizo Ñete metió un gol, producto de una buena jugada del Chuki. En este momento el partido estaba totalmente abierto, y las marcas sueltas. Iba 6 a 1.
“Vamos gemelo, no todo es tu hermano” se quejaba frustrado uno de los Zen ante la insistencia de los Marambio de jugar de memoria y sólo entre ellos.
“Vamos papá”, desde la tribuna animaba el hijo de Ñete.
En el minuto 12, Chuki recuperó un balón en el área de Zen, se la dio a Rubens y este se la pasó a Ñete, quien en cámara lenta (super slow motion by arriflex) sólo tuvo que empujarla. Iba 7 a 1 a favor de Terreviento.
Después de ese gol, el físico de Terreviento se derrumbó y Zen salió con todo, en busca de remontar el marcador. La presión de la marca de Zen dio resultado cuando Sabana perdió un balón en su área y Alec Marambio se la pasó a Julio, quien nuevamente anotó. Era el 7 a 2.
El 7 a 3 fue un golazo de Jhovan, quien inició la jugada desde su área, llevando el balón por toda la cancha, se la dio a Julio, éste se la devolvió, Jhovan la enganchó y mandó un cañonazo al ángulo, un disparo inatajable. Un golazo de Cubillas.
El 7 a 4 vino de un centro, y fue gol de Ñete... en su propio arco: al tratar de rechazar un saque de "cornel" terminó atropellando a su propio arquero, y la pelota le rebotó en la nuca....y pa dentro el autogol.
Después de esto, llegó la clásica “reventada de pelota a acualquier parte para hacer tiempo”. Y con esta estrategia típica del “fulvo" peruano, Terreviento quemó valiosos minutos. Y los Zen no pudieron hacer mucho contra esto. "Árbitro tiempooooo", se quejaba la barra de Zen.
Y los minutos pasaban, y Zen que no podía llegar más. Porque todo Terreviento se metió en su área, como aquella selección de Bolivia del 86, defendiendo como Paraguay del 94, y sudándola como.... Terreviento del Interbandas.
Llegó el pitazo final, y Terreviento reventó de júbilo, pero simbólicamente. Porque los pobres diablos apenas tenían aire en los pulmones para dar el grito vencedor de "CAMPEONES... CARAJO"!!!
Se jugó fuerte, sí, pero con lealtad. "La pelota nunca se mancha", como dijo aquel gran pichanguero argentino, y futbolista.
Así, damas y caballeros, concluyó el 1er Campeonato Interbandas "Rock n Gol 2008", con Terreviento como el I Campeón del Interbanads.
Salud!
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